Pekín, 18 oct (EFE).- China mostró este miércoles su conmoción y dura condena por el ataque contra un hospital del norte de la Franja de Gaza, en el que se han registrado cientos de muertos y heridos y cuya autoría no reconocen ni Hamás ni Israel.
“Lloramos a las víctimas y extendemos nuestro apoyo y compasión a los heridos. China llama a un inmediato alto el fuego y al cese de las hostilidades”, dijo la oficina de portavoces del Ministerio de Exteriores en un comunicado.
El país asiático también pidió “todos los esfuerzos posibles para proteger a los civiles y evitar un desastre humanitario todavía peor”.
El ataque contra el hospital Al Ahli desató numerosas reacciones en el mundo y suma un nuevo ingrediente al conflicto que ya completa once días.
Cerca de 500 personas murieron por un bombardeo en el centro sanitario que los grupos palestinos atribuyen a la aviación israelí, según fuentes palestinas.
Israel niega que se produjera una masacre, asegura que el edificio no está destruido y que únicamente hubo una explosión de menor envergadura en el aparcamiento adyacente causada por un cohete fallido del grupo gazatí Yihad Islámica.
El gigante asiático ha sido uno de los últimos en reaccionar al ataque, sucedido en la misma jornada en la que celebraba el III Foro de las Nuevas Rutas de la Seda con la asistencia de representantes de 110 países, entre ellos el presidente ruso, Vladímir Putin.
En sus discursos en esta cita ni Putin ni el mandatario chino, Xi Jinping, hicieron referencia a la crisis en Oriente Medio, aunque en una reunión posterior sí abordaron el asunto.