A los problemas de servicios públicos, vivienda y vialidad que aqueja a las familias de Colinas del Trompillo, parte alta, situada al noroeste de Barquisimeto, estado Lara, se suma una enorme piedra que está en la cima del Cerro La Cruz, y amenaza con desprenderse. De hecho, rodó medio metro.
La preocupación la manifestaron a El Informador Venezuela Liseth Martínez, Omaira Rivero y Yusbeli García.
Relataron que al sitio acudieron funcionarios del Cuerpo de Bomberos de Iribarren y de Protección Civil y dijeron que la situación le compete a la Empresa Municipal de Infraestructura y Conservación del Ambiente, Emica.
Un funcionario de dicha empresa paramunicipal se trasladó al sitio inspeccionó, midió la piedra y dijo que volvería para pulverizarla. Han transcurrido tres meses y «no da señales».
El llamado es al gobierno a no esperar que ocurra una tragedia para actuar. Son poco más de 50 familias que están en riesgo, enfatizó Martínez.
Calles en pésimas condiciones
Colinas del Trompillo, parte alta, es una comunidad «abandonada» por el gobierno. La muestra es que con poco más de 50 años de fundada las calles son de tierra y se convirtieron en caminos intransitable, recriminaron las mujeres.
Consecuencia de ello, en el barrio abundan los casos de alergia, asma y otras enfermedades respiratorias siendo los más afectados los niños y personas de la tercera edad, recalcó Martínez.
En tal sentido, le piden al alcalde de Iribarren, Luis Jonás Reyes Flores, que, en lo inmediato, al menos «mande a rociar las calles con líquido antipolvo» para calmar la polvareda. Ya no aguantamos, las casas se la pasan ‘full’ de tierra».
Sin servicio eléctrico «propio»
Otra preocupación de los vecinos es un cable de alta tensión, que Corpoelec se comprometió a reubicar y tampoco lo ha hecho, denunció Martínez.
«Cuando se cae una fase, el transformador empieza a echar candela. Está que explota», dijo García.
Martínez manifestó que elaboró un proyecto de electricidad, pero cuando en Catastro le revisaron le colocaron la coletilla de «inconforme», alegando que es zona protegida por la Dirección de Planificación y Control Urbano (DPCU) «y pidieron $50 para corregirlo».
En Coepoelec tampoco lo tomaron en cuenta porque «yo no formó parte del Consejo Comunal».
Con relación al servicio de agua, dijo que les suministran dos veces al mes, pero hay familias que no cuentan con tanques.
Solicitan viviendas y comedor
En la comunidad viven personas en ranchos de bahareque y piso de tierra, que con las lluvias se le han caído paredes aumentando el riesgo de que se desplomen, lamentó Martínez.
Urge que el gobierno desarrolle un plan de viviendas para que la gente viva dignamente, agregó.
Durante un recorrido por la comunidad, El Informador Venezuela pudo observar que hay personas que viven en condiciones críticas, entre éstas la de una mujer quien habita con sus dos niños entre cuatro latas de zinc en donde duermen y cocinan.
La mujer quien no se identificó para «evitar inconvenientes”, relató que tenía un rancho con un cuarto con capacidad para cuatro camas, cocina y comedor por separado, y se lo tumbaron con la promesa de construirle una casa. Además, le pidieron 40 dólares y resultó una estafa.
Apuntó Martínez, que los beneficios no llegan a la zona alta del barrio, pese a las precarias condiciones que afectan sobre todo a adultos mayores, sin familia y con problemas de salud.
En tal sentido, solicita al gobierno de Lara, encabezado por el gobernador Adolfo Pereira, que active un comedor y remedien la necesidad de alimentación a esas personas.
En cuanto a la asistencia en salud, manifestó qué hace poco más de un año cerraron el consultorio. Sin embargo, la doctora atiende el preescolar.
También, si es necesario visita al paciente en su casa, acotó.
Finalmente, Martínez, García y Rivero hicieron un llamado al gobernador del estado Lara, Adolfo Pereira y al alcalde de Iribarren, Luis Jonás Reyes Flores, para que comiencen a resolver tantos problemas. AC