El Glioblastoma Multiforme (GBM) es un tipo de tumor del sistema nervioso central que se caracteriza por su rápido crecimiento, originado a partir del tejido glial del encéfalo y la médula espinal. Este tumor es más común en personas de la tercera edad y afecta con mayor frecuencia el encéfalo, según explica la médico cirujano Franyeli Vargas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que los GBM representan los tumores cerebrales más frecuentes en adultos, con una incidencia anual de alrededor de 1/33.330 y una prevalencia estimada en 1/100.000.
La etiología del GBM es aún inconclusa, con menciones de anomalías genéticas detectadas, como la amplificación del gen EGFR, mutaciones en el gen TP53, y pérdida del cromosoma 10, entre otros. Los síntomas más comunes incluyen hipertensión intracraneal, cefalea, vómitos, cambios conductuales y déficits neurológicos focales.
Un estudio de investigación realizado en diciembre de 2023, que involucró a neurocirujanos y familiares de pacientes con GBM, reveló que este tumor es el más común y maligno de las neoplasias de la glía que afecta al sistema nervioso central. Además, se destacó que las señales indicativas de la presencia de este tumor pueden variar según la localización del mismo y las características individuales de cada paciente.
Vargas explica que el impacto del GBM no solo afecta a los pacientes, sino que también tiene un efecto notable en sus familiares, dado que el pronóstico es desfavorable, especialmente en ausencia de resección total macroscópica, en pacientes de edad avanzada y en casos de déficits neurológicos graves.
El tratamiento de primera línea suele ser la cirugía, seguida de radioterapia dirigida al lecho tumoral combinada con quimioterapia. Estas medidas buscan brindar mayor esperanza y calidad de vida a los pacientes que padecen esta patología, a pesar de que el pronóstico sigue siendo poco favorable.
El impacto del GBM en las funciones neurológicas y en el núcleo familiar es significativo, y la búsqueda de tratamientos efectivos y de apoyo integral para los pacientes y sus seres queridos es fundamental en la lucha contra esta enfermedad devastadora.