En el Hospital Pediátrico Agustín Zubillaga de Barquisimeto se están llevando a cabo «arreglos» en el área de emergencia, que, según las autoridades, será «reinaugurada». Sin embargo, a pesar de estos supuestos trabajos de remodelación, persisten problemas en la infraestructura que afectan el funcionamiento del hospital.
Hoy, se reportó una ruptura de aguas negras en el área de Radiología, un incidente que ocurre con frecuencia y que continúa sin ser solucionado a pesar de los trabajos de remodelación en marcha.
Además, durante la noche de este jueves, se produjo una rotura en una tubería de aguas blancas en la entrada de la zona de Estabilización de pacientes. Esta situación se debió a la falta de una válvula adecuada para esa tubería, lo que resultó en la inundación del área debido a la imposibilidad de cerrar la llave.
Es preocupante que el hueco en la pared lleve meses sin ser reparado y que no se haya solucionado el problema con la llave afectada, sino que simplemente se haya realizado una intervención parcial.
Estos incidentes ponen de manifiesto los desafíos que enfrenta el Hospital Pediátrico Agustín Zubillaga en cuanto a la infraestructura y la necesidad de una atención urgente para garantizar un ambiente seguro y adecuado para los pacientes y el personal médico.