El gobierno español expresó este domingo 8 de septiembre su satisfacción por la llegada a Madrid de Edmundo González Urrutia, opositor venezolano, quien aterrizó este domingo en la base aérea de Torrejón de Ardoz, en la capital española.
Según el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, la operación llevaba «muchos días» en preparación, y se ejecutó a petición del propio González, reseñó “La Sexta”..
En declaraciones a TVE, Albares subrayó que el gobierno español mantiene como «línea roja absoluta» el respeto a los derechos políticos y a la integridad física de los líderes opositores.
Asimismo, volvió a negar cualquier tipo de negociación política con el gobierno de Venezuela en relación con este asilo.
El ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, también enfatizó que “no hubo acuerdos entre gobiernos», y que la solicitud fue realizada por González como ciudadano en igualdad de derechos.
«Somos todos iguales ante la ley», afirmó.
Albares, por su parte, celebró la llegada del opositor con un mensaje en la red social X, donde agradeció a «todos los profesionales» que hicieron posible el traslado, y reafirmó el compromiso de España con la democracia y con los derechos humanos en Venezuela.
Gesto insuficiente
Sin embargo, el Partido Popular (PP) considera insuficiente este gesto.
Esteban González Pons, vicesecretario institucional del PP, criticó que «eso no es hacerle un favor a la democracia, sino quitarle un problema a la dictadura».
Por su parte, la portavoz adjunta en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, acusó al gobierno español de «colgarse medallas por traer al hombre equivocado».
“Que vaya más allá…”
Los populares exigen que España vaya más allá, y que reconozca a González como presidente legítimo de Venezuela.
En respuesta, el Psoe recordó las declaraciones recientes de Isabel Díaz Ayuso, quien instó a abrir las puertas de la embajada para dar protección a González.
Desde el partido Sumar, se espera que este asilo sirva para reactivar el diálogo entre el gobierno de Venezuela y la oposición.
La noticia también ha resonado en Europa, donde Josep Borrell, alto representante de la Unión Europea, lamentó que «hoy es un día triste para la democracia en Venezuela».
Fuente: Versión Final
Gráfica: Referencial
RG