Este martes 5 de noviembre, el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) reportó que 48 presos en los calabozos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) en Lara iniciaron una huelga de hambre desde el lunes 4 de noviembre. Esta acción ha sido calificada como una medida desesperada para protestar contra el hacinamiento y el retardo procesal que enfrentan.
A través de su cuenta oficial en la red social X, la ONG explicó que los reos están exigiendo un «plan de abordaje y traslado a recintos penitenciarios», evidenciando la crítica situación que viven dentro de las instalaciones. «Esta medida extrema refleja la desesperación ante condiciones carcelarias inhumanas, además de ejercer una presión sobre las autoridades para responder a sus demandas», señalaron.
El OVP advirtió sobre las graves consecuencias que puede acarrear una huelga de hambre, como la pérdida de peso acelerada, deshidratación y deterioro de funciones vitales. Con el tiempo, los reclusos podrían enfrentar problemas severos, incluyendo daño a órganos, pérdida de masa muscular y complicaciones cardíacas que pueden ser irreversibles.
Ante esta alarmante situación, la ONG ha exigido a la Fiscalía y a la Defensoría del Pueblo que atiendan de manera urgente las demandas de los reclusos. El OVP busca visibilizar las violaciones a los derechos humanos que sufren los internos y presionar para que se implementen medidas concretas que mejoren las condiciones en las que se encuentran.
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