Los Tigres de Aragua buscan que la tercera vez que clasifican desde el “play in” en forma consecutiva sea la vencida, pero, para ello, necesitan mejorar un aspecto que los hizo pasar bastante trabajo en la ronda regular.
Los maracayeros buscan un nuevo campeonato desde la 2015-2016, y, en esta ocasión, optaron por fortalecer casi todas las líneas en la escogencia, seleccionando a un abridor, un relevista y un jugador de cuadro.
El pitcheo pinta bien
El pitcheo de los Tigres fue el penúltimo en la ronda regular entre los cinco clasificados, con un porcentaje de carreras limpias de 5.19, sólo por encima de Bravos de Margarita.
Sin embargo, la adquisición de Ben Breymer y de Yapson Gómez le da fortaleza a sus brazos, principalmente Breymer ayudaría a armar una gran rotación, junto a: Guillermo Moscoso, Ben Holmes y Collin Wiles, quienes lucieron bastante en la lomita.
Mejorar su producción
En el pitcheo hay confianza por parte del manager Russell Vásquez, por lo antes mencionado.
No obstante, la ofensiva tuvo un gran problema en el calendario regular, como lo fue producir carreras, y eso queda en evidencia con los siguientes números:
Los bengalíes fueron la novena con mejor average colectivo, con .301.
De hecho, fueron el único que superó los .300 puntos, pero en lo que respecta a carreras impulsadas fueron penúltimos con 288, una gran diferencia con los 580 incogibles que batearon (líderes en ese aspecto).
Aunado a eso, fueron sextos en rayitas anotadas, con 310, lo que simplemente deja en evidencia que lo que la ofensiva bengalí debe trabajar es en dar los batazos oportunamente, o, en otras palabras, con corredores en base, y más en posición de anotar.
En ese sentido, este equipo tuvo la mayor inconsistencia en la ronda regular, siendo una franquicia que embasa a muchos jugadores; no obstante, les cuesta mucho traerlos luego a la registradora, y eso esperan cambiarlo en esta nueva etapa, donde evidentemente deben aprovechar cada oportunidad que puedan tener.
Fuente: Meridiano
Gráfica: Referencial
RG