El Gobierno de Paraguay ha dado un ultimátum de 48 horas al embajador venezolano, Ricardo Capella, para que abandone el país. Esta decisión se produce como reacción a la ruptura de relaciones diplomáticas anunciada por el gobierno de Nicolás Maduro este lunes.
En un comunicado oficial, la Presidencia paraguaya exigió que todo el personal diplomático de Venezuela acreditado en el país «abandonen el país en las próximas 48 horas». Esta medida refleja las crecientes tensiones entre ambos países en el contexto de la crisis política venezolana.
Paraguay también reiteró su reconocimiento a Edmundo González Urrutia como el presidente electo de la República Bolivariana de Venezuela. En la declaración, se enfatizó que González tiene el derecho de asumir la dirección de su nación el próximo 10 de enero, en línea con la voluntad soberana del pueblo venezolano expresada en las elecciones del 28 de julio.
Además, el gobierno paraguayo reafirmó su «firme y contundente apoyo» al derecho del pueblo venezolano a vivir en democracia, dentro de un Estado de Derecho, y con un «respeto absoluto a sus libertades y garantías fundamentales». Esta postura refuerza la posición de Paraguay en el conflicto político que ha envuelto a Venezuela en los últimos años, evidenciando un respaldo a la oposición y a la búsqueda de una solución democrática en la nación vecina.