El nadador estadounidense Ryan Loche, a sus 35 años, quiere volver a ser la figura que fue al lado de su compatriota Michael Phelps.
El norteamericano en los últimos tiempos tuvo episodios muy oscuros en su carrera, involucrado en escándalos, suspensión por dopaje y hasta inmerso en el alcohol, como en la comida chatarra, aunque ha querido cambiar su imagen
El declive inició en los Juegos Olímpicos de Río de Jainero 2016 en Brasil, después de un incidente de borrachera en una gasolinera local, que él y sus compañeros quisieron hacer pasar como un intento de robo en el que habían sido víctimas. Luego, en 2018, fue suspendido por 14 meses por violación del reglamento antidopaje, tras recibir una inyección intravenosa.
Esta semana, en su Instagram, muestra como luce su renovado cuerpo, que ha perdido 10 kilos en los últimos dos meses y ahora se prepara para participar en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 en Japón. “Los tiempos que hago son similares a los que hacía en mis entrenamientos de 2012, cuando estaba en mi máxima condición”, para después añadir que piensa representar a Estados Unidos en los Juegos de Tokio. Es ganador de 12 medallas olímpicas.
Antonio José Seijas
Foto: Cortesía