Faustino Zabala, quien fuera receptor de los Cardenales de Lara durante una década denunció y rechazó una medida de desalojo que llevaron a cabo las autoridades en la Villa Bolivariana, conjunto residencial para atletas y deportistas, “De la noche a la mañana me dijeron que tenía 72 horas para abandonar el apartamento”, dijo.
Zabala, ahora con 73 años, es considerado uno de los mejores receptores de la historia de los pájaros rojos y aseguró que tuvo que pedir 10 días para encontrar donde quedarse y a dónde llevar sus pertenencias, después de que le anunciaran en una reunión que debía irse, sin darle explicaciones precisas.
Indicó que junto a él fueron desalojados otros ex atletas a quienes les comentaron que podían alojarse en unos apartamentos que no tenían electricidad y agua, “No tienen condiciones para vivir, estoy desilusionado y un poquito enojado, yo no dije que me botaron como un perro, dijeron que yo le dije eso al Ministro, pero no soy un perro”, aclaró.
El expelotero comenzó su carrera deportiva en el año 1965 con el conjunto crepuscular viviendo momentos inolvidables en los primeros años de la novena en un deporte que comenzaba a formar una liga profesional, los aficionados de la época aún lo recuerdan con gracia y como una gloria de la receptoría, posición que defendió hasta 1975 cuando fue cambiado a los Tigres de Aragua.
“El presidente de Fundela dio la orden”
Actualmente, con un bastón para ayudarse a caminar y acompañado de su amigo Edgar Falsiani, defiende lo que él considera sus derechos y el de los que habitaban en la infraestructura que pertenece al Estado y se encuentra administrada por la Fundación para el Deporte en el estado Lara (Fundela). “El que da la orden fue el presidente de Fundela en una asamblea, en Caracas mandaron a desalojar a los atletas para apartamentos que les dio el gobierno, ¿por qué no lo hacen aquí?”, añadió.
Faustino contó que su dificultad para caminar se debe a un mal tratamiento recibido dentro de la Villa, lo que presuntamente le provocó una ulcera en el pie, “Me lesionaron ahí mismo, me pusieron un mal tratamiento de la fisioterapia, lo que hicieron fue que me quemaron el pie, no puedo pisar, ni estar sentado, nadie se hace responsable de eso, nadie sabe nada”, sentenció.
El exreceptor también fue parte de organizaciones de Grandes Ligas donde llegó a disputar encuentros de Triple A con los Bravos de Atlanta y las Medias Rojas de Bostón, aunque nunca llegó a la Gran Carpa, su nombre se dio a conocer durante siete años probando en las ligas menores.
Su estancia en los dormitorios de la Villa duró unos cinco años y aunque lo agradece, piensa que los desalojos sirven para culpar a ciertas personas de “tantas cosas que se han perdido” en el lugar. “Hay cosas que se han robado pero es responsabilidad de ellos mismos, para sacar algo de ahí tiene que ser con complicidad de alguien de ahí”, señaló.
Nuevos inquilinos
Zabala agregó que las autoridades llevaron a unas nuevas personas de nacionalidad extranjera a las instalaciones de la Villa Bolivariana para que hospedaran, “Trajeron a unos cubanos y dijeron que no iban a vivir en esa ‘pocilga’ sin embargo se metieron y ahí están”, contó.
Hasta ahora Fundela y la Gobernación del estado Lara no han emitido declaraciones al respecto, el expelotero dijo que los desalojos han sido reiterados sin explicaciones.
Enmanuel De Sousa
Foto: Daniel Sosa/Archivo