Tras una semana desaparecida y luego de una campaña en su búsqueda tanto en la calle como en las redes sociales, encontraron sin vida a Beatriz Álvarez, con un cinturón en el cuello y entre el box y el colchón de su cama, todo esto en su casa, ubicada en la urbanización El Trigo de Los Teques, estado Miranda.
Desde el pasado lunes 16 de marzo, familiares de Álvarez se plegaron a rastrear a la mujer luego de que fuera notificada como desaparecida. La familia recurrió al Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas para formular la denuncia, donde les instaron a buscar principalmente en algún centro asistencial.
Se presume que el día de su desaparición, cerca del mediodía, Álvarez salió de su trabajo en una peluquería ubicada en la calle Ribas para realizar unas compras con que pasar la cuarentena, lo cual notificó a sus familiares. Luego de ello, no se supo más de Beatriz.
Debido a eso, se abocaron a buscarla, pero no fue sino hasta el domingo 22 cuando las autoridades policiales hallaron el cuerpo de la dama en su propia residencia, luego de que vecinos se quejaran de un fuerte olor emanando de la vivienda, lo que activó las alarmas y requirió de la presencia del cuerpo de seguridad estadal.
El caso está bajo investigación del Eje de Homicidios del CICPC en la capital mirandina. Se presume que le robaron divisas y otros diversos bienes.