El FC Barcelona comenzó este viernes los entrenamientos después del obligado confinamiento que se prolongó durante los dos últimos meses, siguiendo estrictamente los protocolos de seguridad establecidos por LaLiga de acuerdo con lo ordenado por las autoridades sanitarias.
Los futbolistas azulgranas se dividieron en dos grupos que se ejercitaron durante unos 50 minutos distribuidos en tres grupos de la Ciudad Deportiva Johan Cruyff.
El primer grupo, que comenzó a trabajar a las 9:30am, estuvo compuesto por Leo Messi, Luis Suárez, Griezmann, Lenglet, Ter Stegen, Piqué, Umtiti, Sergi Roberto, Arturo Vidal, Jordi Alba y Junior Firpo, quienes fueron llegando en sus coches particulares desde las 9 de la mañana.
Cuando estos iban abandonando las instalaciones, minutos antes de las 10:30am, fueron llegando los restantes futbolistas: Neto, De Jong, Raquitic, Busquets, Semedo y Braithwaite, además de los canteranos Ansu Fati, Riqui Puig, Peña, Araujo o Collado, quienes comenzaron su sesión a las 11 de la mañana.
La primera jornada de entrenamiento estuvo centrada en comprobar el estado físico de los jugadores, que antes de tocar balón hicieron pruebas de carrera con un chaleco GPS que medía los datos, antes de un test de velocidad para ver sus facultades de aceleración.
Tras estos primeros ejercicios, los futbolistas tocaron balón zigzageando entre las picas colocadas en el césped y llevaron a cabo circuitos preparados, desplazándose también al gimnasio, siempre en grupos de dos, para realizar una prueba de fuerza.
Todos los futbolistas llegaron ya vestidos para entrenar desde sus domicilios y se presentaron directamente en el campo en el que estaban citados, sin pasar por el vestuario, y a la finalización, volvieron directamente a sus vehículos para regresar a casa, siguiendo igualmente las ordenanzas del protocolo.
Los jugadores, de acuerdo a lo comunicado por LaLiga, no pueden más que desplazarse diariamente entre sus casas y los centros de entrenamiento, teniendo prohibido expresamente recibir visitas en sus domicilios por más que a partir de la próxima semana, con el pase a la fase 1 decretada por el Gobierno se permitan reuniones de hasta 10 personas.
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